A menos de una semana de las elecciones a gobernador en Mendoza, el candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Luis Petri, ordenó a su equipo que vote por el candidato de La Unión
Mendocina, Omar de Marchi.
Petri obtuvo en las PASO el 40% de los votos en la interna en la que compitió
contra Alfredo Cornejo, siendo la sorpresa de esos comicios. Desde entonces, el candidato a gobernador radical no ha hecho más que sumar al ex legislador a su campaña para intentar retener sus votos, incluso realizó una millonaria inversión en publicidad llenando con carteles la Ciudad donde
aparecen juntos en las imágenes. Sin embargo, la estrategia de Cornejo falló y Petri finalmente mostró su inclinación por Omar De Marchi.
Más de la mitad de los que votaron por Petri actualmente están manifestando su respaldo a De Marchi. Esto se da principalmente porque el candidato a vicepresidente en la campaña de las PASO fue muy crítico con Cornejo y con la gestión de Rodolfo Suárez. En concreto, Petri y De Marchi tienen fuertes coincidencias en temas de política local y medidas a implementar para sacar a Mendoza del pozo.
Por otro lado, en el mes de septiembre la prestigiosa consultora Poliarquía realizó una medición que en un escenario de polarización de cara al 24 de septiembre, entre Alfredo Cornejo y Omar De Marchi ubica como ganador al candidato de La Unión Mendocina con 43 puntos contra 41 de Cornejo.
Este respaldo enfatiza que De Marchi y La Unión Mendocina representan una alternativa de cambio ante el desgaste sentido por los ciudadanos de Mendoza después de una década de estancamiento. Es evidente que los votantes están apostando por una nueva administración, dejando atrás un gobierno que ha estado al frente de la provincia durante ocho años.